miércoles, 28 de septiembre de 2011

El todo y la nada

Nada es por nada
y la nada, no es por la ausencia del todo.
Todo es nada,
cuando no vemos lo que está entre nosotros.

La sensación de sentirse en medio de la nada
es por la conjunción del todo;
es cuando sentimos
que el mundo está sobre nuestros hombros.

Porque te sentís mal,
si todo te molesta y nada te entusiasma.
Ya que todo es un problema
si en la nada tu te hayas.

Entonces habrá que llorar
si queremos vivir mejor el mañana.
Pero no vivir llorando,
ahogándonos en nuestras lágrimas.

Porque solo sufre el que tropieza
y solo aprende el que se levanta.
Por ello, no debemos dar batallas por perdidas
sino perder siempre dándole batalla.

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