En un día nublado sin mucho que hacer
camino a la casa de mi padre
miro al piso, queriendo entender.
Busco vestigios del pasado que fue
y despierto la nostalgia que corrompe mi ser
trayendo mil recuerdos que extrañan el ayer
Surgen en mi mente las frases de siempre
Trilladas como ninguna, pero que siguen vigentes.
“No valoraras lo que tienes hasta que un día lo pierdes”
Pero como diría Pablo Neruda en su poema 20
Con sabias palabras, como si el entendiese
”Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido”
Que con un solo verso describe mi camino.
Como si alguna vez él, tuviera el mismo desafío,
de querer dejar atrás las locuras del destino.
Que hoy te lo da todo y en un acto de cinismo
Te lo vuelve a quitar, robándole el dulce al niño
Dejándolo al borde del profundo precipicio
En el que yacen los escombros de aquel amor perdido
Que está lleno de recuerdos que retratan lo vivido
Maniatándolo a este corazón que vaga sin sentido.